Cuando un fertilizante fosfatado soluble en agua se añade al suelo, se disuelve rápidamente y reacciona para formar compuestos de baja solubilidad. Cuando la RF se añade al suelo, se disuelve lentamente para liberar gradualmente los nutrientes, pero en algunos suelos, la velocidad de disolución puede ser demasiado lenta para sostener el crecimiento saludable de la planta. Para optimizar la efectividad de la roca fosfórica, deben considerarse los siguientes factores:
- El pH del suelo: la roca fosfórica requiere condiciones ácidas del suelo para ser una fuente de nutrientes efectiva. Generalmente, no se recomienda el uso de RF cuando el pH del suelo es superior a 5.5. El encalado para elevar el pH del suelo y reducir la toxicidad por Al puede reducir la tasa de disolución de la RF.
- Capacidad de fijación de P del suelo: la disolución de la RF se incrementa con una mayor capacidad de fijación de P del suelo (por ejemplo, con alto contenido de arcillas).
- Propiedades del suelo: bajos contenidos de calcio y alta materia orgánica del suelo tienden a acelerar la disolución de la RF.
- Ubicación del fertilizante: la aplicación al voleo e incorporación de la RF con labranza acelera la reacción con el suelo.
- Especies de cultivo: algunas especies de plantas pueden utilizar mejor la RF debido a la secreción de ácidos orgánicos desde las raíces al suelo adyacente.
- Tiempo: debido al tiempo necesario para la disolución de la RF, esta requiere ser aplicada anticipadamente a la demanda de la planta.