La marchista nacional, Evelyn Inga, quien terminó en el sexto lugar del Mundial de Budapest, señaló que llegar en el sexto lugar es algo positivo para ella ya que cumplió un objetivo.
Evelyn, emocionada y con la voz entrecortada, saluda a su patria en su aniversario y se hace la promesa de dar su máximo esfuerzo para seguir entre las mejores del mundo. “Si gano una medalla, mucho mejor, sólo sé que, con mucha determinación y trabajo honesto, tendré los frutos”.